El Siervo de Yahvé (el Rey que se sacrificaba por la nación) era ya en la época helenística un anacronismo incomprensible desde el punto de vista de las prácticas del judaísmo normativo. Pero la muerte de Cristo fue considerada, sin embargo, por la Iglesia como un sacrificio de purificación y expiación inspirado en la figura de Isaías.
Mito de la Muerte-Resurrección I.
El dios sumerio-acadio-babilonio Dumuzi-Tammuz se convirtió en arquetipo y modelo de los dioses que morían y resucitaban al modo de la naturaleza vegetal. Si bien, más allá de las lectura cósmica o antropológica del mito, y más allá de las posibles interpretaciones mistéricas, Tammuz ofreció durante siglos abundante misericordia y consuelo con los que aliviar los sufrimientos de los afligidos.
Los Cultos de Fertilidad y el Sacrificio del Rey Sagrado.
Garantía de regeneración y supervivencia de los frutos de la tierra, y contraprestación también a la generosidad de la Diosa Madre, el ritual del sacrificio Neolítico (el asesinato del Rey Sagrado) renovaba periódicamente las fuerzas cósmicas a través de una nueva creación y hacía posible la resurrección de las cosechas. Todo moría en invierno para resucitar en primavera.
El árbol cósmico como árbol sagrado y árbol del mundo.
El Árbol Cósmico representaba el misterio central que explicaba la renovación periódica del mundo a través del poder oculto de la diosa neolítica como totalidad viviente. Un contexto agrícola en el que la Diosa Madre regulaba el flujo de los jugos de la tierra, que, por medio del árbol, extraía de las profundidades para alimentar a los hombres.
The «Sacrifice of the Sacred King». Myth, ritual and meaning.
The sacrificial and violent death of the Sacred King (the son of the queen or of the Neolithic goddess), was the outstanding part of an archaic ritual that, periodically, pursued the propitiatory influence of the invisible forces and energies of the Goddess-Earth on the renewal of the cosmos and the expiation of the impurities and the faults of the village.